miércoles, 19 de noviembre de 2014

Conversando con... desde otro punto de vista


Este post lo hago a modo de conversación o dialógo con el colega Alberto Manuel León. Dichoso él que salió de Cuba por amor y que vive en un país que hasta donde sé, es vanguardia en América Latina en cuanto a derechos humanos fundamentales.
Aquí va el texto.
Lo que está en cursiva es el texto tomado de su blog, el que no está en negrita es mi respuesta o comentario a su criterio.

 

Cuando salí de Cuba lo hice por amor. Si miles de cubanos buscan una mejor vida en materia económica o no aguantaron más el Granma y el picadillo de la libreta yo salí a estar con mi novia. La primera señal de que había salido de Cuba fueron las luces. Camagüey o La Habana desde el cielo y de noche son un candil, de esos que hacía mi madre con un tubo de pasta en el periodo especial, comparado con la luces de la ciudad de Lima o de la docta Córdoba que me recibió con menos de 5 grados.

Bueno, Hubo una época de mi vida , sin que me quede nada por dentro yo estaba loco por irme de este país aunque fuera a nado. Hace 12 años exactamente cambié de idea porque aposté por pensar que antes de cumplir los treinta este país mejoraría, además de que el amor había tocado mi vida por segunda vez, de la manera más retorcida que yo hubiera pensado, pero hizo que yo repensara el rumbo que había tomado mi vida, mi forma de ser y el cómo me proyectaría de ese momento en lo adelante. Nada, que con veinticuatro años de edad me vine a vivir para la habana, la gran ciudad, con casa propia, ilusionado de haberme enamorado de un hombre y con muchas esperanzas de salir adelante profesionalmente.

Mi mudanza a la habana fue en tren, nada que ver con lo que había dejado atrás, no comparo donde estás con Cuba, pues la diferencia es de un siglo y medio. Pero debo comentarte que lo que sentí al pisar la habana fue parecido a ese sentimiento de cambio que experimentaste al llegar al lugar donde vives en la actualidad. Cuando llegué a la Habana, sin enarbolar las cosas, sentí que había renacido de algún modo, o que estaba iniciando un proceso de metamorfosis en mi identidad. Claro, mirándolo desde la limitación intelectual que tenía en aquel tiempo. Era un diamante en bruto, como decía mi amante en aquel momento “muchachito tu sabes nada de la vida”.


Tres años pasé soñando con tener internet. Yo, un animal digital y conectado, anhelaba sumergirme sin miseria ni límites de pestañas abiertas, velocidad, flash ni de ningún tipo en la web. Coño navegar de verdad como hacen miles de millones de personas en el mundo. Poder ver un video fue una delicia. Me sentí pleno navegando sin límites ni restricciones. Esas clases y lecturas puramente teóricas en la facultad por fin pudieron concretarse y completarse.

Ese es un trauma con el que debemos lidiar (los que estamos aquí) el resto de nuestras vidas en este país, porque al ritmo que van las cosas, pasarán 10 años y no habrá cambio significativo en las telecomunicaciones. Lamentablemente, a mi me duele más por haber visto la evolución de Internet en el país desde sus inicios en 1995.

Pero lo que sí me hizo el hombre más feliz(con la mayor ingenuidad lo digo) es no tener un funcionario del partido, dirigente o profesor regañandome, amenazandome o llamandome apara “conversar” sobre algo que escribí. Ya nadie me podrá “quitar” el acceso a la red. Por primera vez en mi vida he sentido plena libertad.

Comparo tu felicidad y siento tristeza por vivir dentro de ese circulo vicioso que mencionas.

Aparte de esas cuestiones que afectan a todos los cubanos y que me tocaba bien cerca por amar el periodismo y no eso que se hace en cuba lo que me dio esperanza y me hizo pensar en un futuro mejor es estar lejos de toda la propaganda y poder percatarme por mi mismo de como esta Cuba.


Me alegra que lo veas de esa forma.

En Argentina, país que me ha acogido generosa y cariñosamente como hace con todos los emigrantes (posiblemente uno de los pocos países en el mundo tan abierto en ese tema) hay varias diferencias que me han hecho darme cuenta de que Cuba está en el siglo XX todavía y ni tan siquiera en los finales sino en la primera mitad:




- Existe Salud y Educación gratis: Las escuelas y hospitales públicos están disponibles (y mejor equipados en muchas ocasiones ) a cualquiera como mismo están las privadas. Libertad de elegir.

Lo que me jode es que aquí en Cuba todavía existe gente que le gusta restregarte en la cara que “todo es gratis” y es nuestro deber agradecer y adorar.... que hayamos tenido acceso a la Salud y Educación gratis, porque en Cuba es donde único existen esas garantías.

- Existe una Ley que no permite enjuiciar a los periodistas.Libertad de prensa.

Bueno, tu sabes que eso es ficción para Cuba verdad? Voy a exponer algunos ejemplos -en mi ingenuidad de por qué-

1 – Existe un vecino que utiliza la prensa iba para hacer campaña contra Cuba. Por lo tanto toda persona que reciba, o tenga algún tipo de relación con ese vecino, es una persona no grata, contrarevolucionaria, gusana, cibermercenaria, mercenaria, etc.
2 – Toda persona que ejerce el periodismo -independiente- corre el riesgo de ser asociada con ese vecino y como mencionas anteriormente que siempre se aparece un “funcionario del partido, dirigente o profesor regañandome, amenazandome o llamandome apara “conversar” sobre algo que escribí...”

3 – No existe una ley de libertad de prensa, porque la prensa está al servicio del pueblo, pero controlada por el Estado ¿Te suena?

- Existen cientos de medios de prensa entre revistas, diarios, canales y radios en todos el país. Solo en la ciudad en que vivo y en la cual solo viven cerca de 40 mil habitantes hay más de 6 radios, 3 periódicos, un canal de TV y ninguno es del gobierno, aparte de sitios web y folletos independientes.Libertad de prensa.

Bueno aquí existe la televisión por cable, pero si te agarran tu sabes lo que te sucede.... idem lo demás. La ley de asociaciones sigue yo ni sé donde sigue. De libertad de prensa (en la práctica) sigo soñando con esa palabra.

- Los sindicatos son una poderosa fuerza que lucha y consigue importantes mejoras para sus obreros: aumentos de salarios anuales, indemnización por despido, pago de obras sociales para atención médica. Sociedad Civil.

Sin que me quede nada por dentro, envidio mucho esas garantías. Yo no sé que va a ser de mi cuando llegue a los 60 si es que continúo con vida o viviendo en Cuba, porque por lo que veo, calidad de vida, bienestar, sociedad civil, son temas que según mi percepción, son poco importantes a la agenda de mi gobierno. Qué te puede decir este joven que ya ha pasado los treinta años, que ese egoísta pensamiento de cazarse porque cree en la monogamia y el compromiso reforzado a través de la firma de un documento. Quien delira porque en donde vives ahora podría formar familia, tener hijos, amar sin miedos. Pero aquí, donde estoy ahora lo que existe es muchos clubes y casas de alquiler para “matar jugada” porque la ley no da garantías a determinados sectores de la sociedad civil porque “es inmoral e impropio”. Sin olvidar que en el ámbito “obras sociales” el bloqueo de nuestro vecino impide que la economía pueda ser sustentable...


- Existen numerosos partidos y agrupaciones políticas en todo el país. Libertad política.


Para que eso llegue a nuestro país; La constitución debe cambiar drásticamente; dialogo real con los sectores de la sociedad civil que no compartan las políticas del actual régimen que ocupe el poder, entre otros aspectos.

- Para los argentinos la música cubana comprende a Gloria Estefan, Celia Cruz y Buena Vista Social Club y Silvio Rodríguez y Pablo Milanés. No pueden entender que en Cuba nunca se escuchó a Celia o a Gloria en ningún medio oficial, siendo nuestras cantantes más famosas a nivel mundial en la historia.


Se repite la sentencia: dialogo y respeto al criterio del otr@. al esto no existir, se ha optado por ignorar, censurar y demonizar. Lamentablemente, la sociedad cubana en un número considerablemente alto fue educada en esa cultura; la del no dialogo, la de gritar en ves de conversar y la de imponer en vez de negociar.



- Para los argentinos los cubanos somo negros bailarines y musculosos.La sorpresa al ver a un blanquito y periodista es mayúscula.

¿Qué esperabas? Por suerte eso está cambiando con los últimos tiempos, pero existe el lastre político que ha generado desconfianza y xenofobia hacia las y los cubanos por el fenómeno migratorio entre otras cosas desagradables, señalando el hecho universal de “botar el sofá y juzgarnos a todos por la metedura de pata de unos pocos”.


- Todos se asombran cuando digo que estudié periodismo. ¿Eso existe en Cuba? Es la pregunta demoledora que me hacen todos.

Jajaja, El choque cultural hermano, seguro te diste gusto explicando cómo funciona el “periodismo” dentro de nuestro país.

- La información que se conoce de Cuba muchas veces no proviene de sitios de la isla. La mayoría de los artículos sobre Cuba que tienen éxito en internet lo realizan empresas o personas fuera de Cuba. Muchas veces la información es incorrecta o incompleta.

Pero en otras es bastante correcta y coherente con lo que realmente sucede dentro. Parte y parte. Los medios y la agenda política de cada quien juegan un papel fundamental en esto.


- Lo que sí lastimó mi orgullo es que para muchos en Cuba no hay jabón, ni lapiceros. Muchos en conversaciones me dicen que ellos llevan lapiceros y jabones para “ayudar”.

Sin estar allá, he chocado con esa realidad aquí en Cuba. Y duele, y es patético.


- Todos conocen a Fidel y todos preguntan ¿ está vivo? ¿Cómo ustedes aguantaron más de 50?

Esa es la pregunta clásica hermano, acostumbrate que te la van a hacer muchas veces.

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