hablando de la sociedad común y sus contradicciones, en fin,
filosofando :).
En el camino nos subimos al metro-bus ruta p4 y nos percatamos que,
unas personas de mas o menos unos 3 o cuatro años menores que yo
hacían un escandalo tremendo(bueno era imposible no percatarse),
parecía que estuvieran sordos o no se que, ya que me parece que no es
normal que una persona grite dentro de un lugar lleno de gente solo
por diversión o deseos de llamar la atención(pienso que es necesidad
de aceptación, o síntomas de déficit etc, etc..)bien, que algo no anda
bien en el imaginario de estos jóvenes en particular.
Un señor los miraba de una manera peculiar, al colega que me
acompañaba yo le decía - Mira la cara de ese señor ,
a lo que me respondió a la par que interpretaba sus gestos, -estos
muchachos no tienen el
derecho de agredir el oído de las personas que están dentro de éste
ómnibus y mucho menos el chofer su música a todo volumen(reggeton,
en ese momento), en otros lugares del mundo, esta conducta es
sancionada drásticamente.
Sarcásticamente me sonreí y le dije, -hay papá, si les dices algo lo
menos que te puedes buscar que te digan "viejo cheo", o a mi "fuera
de vista" o en el peor de los casos te agredan físicamente, sin contar
además su irritante gritería, su mirada de "¿y a ti que te importa?,
!me da la gana!, ¿que vas a hacer?".
En fin. ¿como le ponemos freno a la vulgaridad y el mal gusto?.
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